viernes, 4 de abril de 2008

Asignatura: Periodismo especializado en conflictos

LA MISERIA DE GAZA
En el territorio de Gaza y de Cisjordania es donde el ojo humano se da perfecta cuenta de la agresividad innata que todo ser esconde dentro. Y como ya nos dijo Gandhí: "Más que los actos de los malos, me horroriza la indiferencia de los buenos". La pena de esto es que tres años después de que Israel –el gran temido de Oriente Medio- abandonara, simbólicamente, el frente de Gaza. Las autoridades israelinas siguen teniendo el control de las fronteras. Y es así como pueden castigar a la población de Gaza, con un control de las entradas y salidas de las mercaderías. Sin que el resto de organizaciones internacionales lo pueda evitar.
A todo el mundo sorprendió cuando Hamas ganó ampliamente las elecciones del 2006. Y es que esta población, en su mayoría palestinos, ya esta acostumbrada a las restricciones y violencia cuotidiana. Pero las necesidades y el hambre mueven a más personas que solo la ideología. Y aunque las Cartas Fundacionales de los movimientos revolucionarios, durante casi más de treinta años, nieguen otro objetivo que el del derecho al retorno. Es sabido que el éxito de Hamas en los Territorios Ocupados, fue en gran parte, un reconocimiento civil a su impresionante hoja de servicios: resistencia frente a las agresiones del ocupante, honestidad en la gestión pública, opciones para los sectores sociales más necesitados y voluntad de unidad nacional y política.
Pero este, un gobierno democrático elegido mediante elecciones por el pueblo, no es reconocido fuera de sus fronteras. Es más es visto como el peor enemigo, por lo que después de ganar las elecciones le fue imposible formar un gobierno de coalición con otras fuerzas políticas. El conflicto de intereses internacionales, y la crisis humanitaria que esta guerra aun arrastra, deja mucho que desear a las posibles definiciones de estado, que para este territorio se barajan. Más aún en un contexto histórico donde el estado de naciones, incluso en las democracias más sólidas, ya esta en crisis.
Pero tal y como nos explicaba Isabel Galí: “un corresponsal que cubre un conflicto no solo puede enfocar el tema a un nivel político. Si no que tiene que hablar con todos sabiendo cuáles son las trampas o filtros que ha de usar con cada uno”. Así, nos contaba que los palestinos eran mucho más abiertos porque quieren que la gente sepa que les pasa. Ya que como todos, están convencidos que ellos tienen la razón. Por el otro lado, los israelitas cuestan más de hacer hablar, ya que muchos no reconocen que ocuparon las tierras cuando ya vivía gente en ellas.
Hamas que se apuntó un importante éxito frente al mundo al tirara abajo el muro de la frontera de Rafah, añadió a su vez una humillación más al desmejorado gobierno de Olmert. Israel, como le pasa a Estados Unidos y a cualquier líder mafioso, no puede consentir que sus victimas le toreen impunemente. Hamas va por el mundo ofreciendo acuerdos de paz a terceros países (diferentes de Estados Unidos) y éstos son los que hacen público que Israel no los acepta. Por eso la mejor forma que tiene el gran poderosos de Oriente Medio de no negociar con Hamas es provocarlo para que renuncie a hacer acuerdos, tal y como su filosofía previene. Así tenemos a un Israel poderoso que no tiene miedo a la cobertura que los medios de comunicación internacionales den de sus acciones. Y así es como los informativos de todo el mundo se llenan de imágenes de la crueldad que sirve Israel, siendo capaz de matar veinte o más palestinos diarios durante uno a dos meses.
Y si el cierre del muro de Rafah, ya fue un castigo del todopoderoso por la fluidez de los atentados palestinos suicidas. Los nuevos elementos del conflicto solo serán un devenir de la ira y el rencor que Israel pretenda ejercer. Aunque el problema se encuentra en esa población, un 70% de la cual es refugiada y no dependen de la autoridad de Hamas, sino de la múltiple solidaridad humana que desde hace décadas este conflicto ha despertado. Por esos los refugiados de esta zona dependen de Karen Koning Abuzayd, que mantiene relaciones difíciles con las autoridades israelinas, que son las que le proporcionan seguridad. Y ninguna relación directa con el gobierno de Hamas aunque si con sus técnicos a pie de calle. Así vemos como la propaganda que se le ha hecho a este gobierno es de terrorista internacional incluso dentro de sus propias fronteras.
También hay que destacar los múltiples movimientos internacionales que la causa palestina ha originado en las dos últimas décadas. Sobretodo durante los crímenes de guerra israelinos, fue palpable la labor de las “Mujeres de negro” que se manifestaban en los lugares públicos de todo el mundo como repulsa a esa violencia, o B’Tselem que lucha por los derechos humanos dentro de Palestina. Pero también fueron varios los movimientos que defendían a los soldados israelinos que no querían obedecer las órdenes de arriba. Soldados que su propia conciencia impedía ejecutar esos crímenes a sus vecinos, y que organizaciones como “Shuri” “Gush Shalom” o “Yesh Gavul” (en árabe: hay un limite) intentaron rebajar sus penas y consecuencias creando precedentes de objeción militar.

1 comentario:

Què t'anava a dir dijo...

En resum: HI ha uns rics i poderosos i uns pobres que han d'ocupar un mateix territori. Els pobres només tenen la guerra com a arma i els rics ho tenen quasi tot. Que han de fer jugar la seva única carta. Idenpendenment de qui tingui raó. Mana la força i el poder. Solució: un guanyador i un perdedor i donant voltes a la truita.